La mejor manera de correr con un perro
Correr con tu amigo peludo es una excelente manera de pasar tiempo de calidad juntos y, al mismo tiempo, mantenerse en forma. La condición física de un perro es un componente esencial del bienestar general y conseguir un compañero para correr también puede ser una gran fuente de inspiración.
Convertir a tu mascota en tu compañero de jogging puede ser muy beneficioso. Mejorarás tu salud, tu satisfacción y crearás una conexión especial... para ambos, si aprendes a enseñarle a tu perro a correr de forma eficaz.
Es importante que vayas aumentando poco a poco tu nivel de carrera ideal. Los perros, al igual que los humanos, deben aclimatarse a distintos grados de ejercicio. También puedes investigar la raza de tu perro para ver qué tipo de trote le gusta: quién sabe, ¡quizás te inspire para correr una maratón en el futuro!
Pero correr con tu perro siempre requiere tomar algunas precauciones antes de empezar. Por eso hemos creado esta guía para contarte algunas prácticas recomendadas para correr con tu perro y fortalecer ese vínculo que ya es fuerte.
7 prácticas recomendadas a seguir para correr con tu perro
Aquí te contamos 7 cosas que debes tener en cuenta y cuidar si te has decidido a iniciar una rutina de running con tu amigo canino.
¿Es bueno para tu perro correr?
Lo primero y más importante que debes hacer es comprobar si tu perro está lo suficientemente sano como para correr. Algunos perros no pueden correr en absoluto, mientras que otros están criados específicamente para correr. Puedes encontrar más detalles sobre qué es lo que hace que un perro sea apto para correr en las guías para perros corredores que hay en Internet. Por supuesto, siempre debes consultar a tu veterinario para determinar la cantidad adecuada de actividad física para tu perro. Cuando corras con perros con sobrepeso, mascotas con ciertos problemas de salud previos y cachorros cuyas placas de desarrollo óseo no se hayan cerrado por completo, debes tener especial cuidado.
Consigue el equipamiento adecuado para que tu perro corra
Una correa de mano o un arnés son imprescindibles si estás pensando en empezar a correr con tu perro. Los perros que nunca han corrido son impredecibles. Puedes controlar, dirigir y detener al perro con la correa en la mano en cualquier momento. Con los perros principiantes, las correas que se atan a la cadera pueden llevar al corredor a situaciones peligrosas, especialmente si son ligeras. Una correa portátil te da el control que necesitas.
Un arnés ayudará a tu perro a correr libremente. Los collares pueden estrangular a tu perro y limitar la rapidez con la que puedes disuadirlo de que se aleje de objetos peligrosos. Si tu perro persigue algo que no debería perseguir y un tirón de la correa no funciona, un arnés elástico de Calmshops te dará un control total sobre el perro.
Además de un arnés y una correa, tu perro también debe llevar un collar de identificación y un microchip para perros que te ayude a localizarlo en caso de que se aleje demasiado de ti. Además, en tu mochila debes llevar una chaqueta para perros por si hace frío, ungüentos para las patas y un recipiente de agua plegable para tu perro.
Primero camina y luego corre
Antes de empezar a enseñarle a tu perro a correr junto a ti, asegúrate de que puede caminar con la correa suelta. Al pasear, un amigo peludo que tira de la correa es un inconveniente, pero a velocidades más altas, puede ser mortal. No olvides que el entorno está lleno de distracciones para los perros, como ardillas, basura, ramas y olores inusuales. Por lo tanto, si quieres que el perro permanezca cerca de ti mientras cuelgas la correa en forma de J, debes ser igualmente gratificante. Recompensa a tu perro por mantener la cuerda suelta con golosinas, juguetes y elogios.
Cuando empieces a correr con tu perro, es muy importante que lo mantengas a tu lado en lugar de delante. Si corre por delante o zigzaguea de un lado a otro, puede tropezar con tus piernas o enredarse con la correa. Por eso es importante elegir un lado, izquierdo o derecho, y ceñirte a él para entrenar a tu perro a correr de ese lado.
Comprueba si las condiciones meteorológicas son adecuadas para que tu perro corra
Consulte a su veterinario sobre el riesgo de que su perro sufra un golpe de calor y obtenga asesoramiento preciso sobre los grados en los que es seguro que haga ejercicio.
Cuando hace calor, tu perro es más susceptible a sufrir agotamiento por calor y golpes de calor. Además, las temperaturas del asfalto son sustancialmente más altas que las temperaturas exteriores, lo que provoca que las almohadillas de las patas de tu perro se quemen. Toca el suelo caliente con tu mano durante seis o siete segundos. Si sientes una sensación de ardor en la mano, entonces también hace demasiado calor para las patas de tu mascota.
Si vives en una zona donde hay hielo y nieve durante el invierno, ten cuidado al sacar a tu perro a correr. Cuando hace frío, los perros pueden deshidratarse y el hielo puede hacer que pierdan el equilibrio y se lastimen. El hielo derretido también puede dañar sus patas.
Te recomendamos buscar calzado para perros que evite que sus patitas se lastimen tanto en altas como en bajas temperaturas. Antes de usarlo, asegúrate de que le quede perfecto y sea apto para correr, y aclimata a tu perro a él.
Añade comandos y acelera con señales
Si tu perro comete un error mientras paseas, no está listo para correr. Enséñale algunas órdenes sencillas para que las use cuando salgas a correr. "Déjalo" es una orden útil, ya que entrena a tu perro a evitar o alejarse de elementos atractivos a lo largo del camino (como la basura). También es fundamental enseñarle a tu perro a "sentarse" y "quedarse quieto", especialmente en las intersecciones de calles.
Puedes aumentar gradualmente el ritmo a medida que tu perro camina por la ruta como un niño o una niña inteligente. Es una buena idea utilizar una señal para que el perro reconozca que estás acelerando.
Para empezar a caminar, puedes usar la señal "Vamos, vamos" y puedes elegir otra señal, como "¡Corre, amigo!", para indicar que es hora de correr. Puedes darle otra señal a tu perro para que comprenda cuándo es hora de disminuir la velocidad. Para obtener resultados óptimos, usa las mismas oraciones una y otra vez. Recuerda siempre usar correa para perros para correr .
Ayude a desarrollar la resistencia de su amigo peludo
Si buscas las mejores formas de correr con tu perro, no debes pasar por alto esta. Es hora de poner a tu perro en forma para que sepa cómo mantenerse a tu lado y seguir tu ritmo. Tu perro, al igual que los humanos, necesita adquirir resistencia muscular gradualmente. Comienza incorporando breves ráfagas de carrera a su paseo. Luego, en paseos sucesivos, aumenta de manera constante la cantidad de tiempo que pasas trotando mientras disminuyes la cantidad de tiempo que pasas caminando. Tu perro se acostumbrará a correr grandes distancias después de unas pocas semanas.
Preste atención a su perro y tome descansos
Durante una carrera, haz breves pausas para que tu perro se relaje, se estire, huela y beba un poco de agua. Si le permites que salga a correr por un corto período, puede que se sienta muy feliz cuando tengas la oportunidad.
Tome descansos más prolongados si observa alguno de los siguientes aspectos de agotamiento: jadeo intenso y rápido, labios excesivamente retraídos, babeo profuso: todos son signos de que su perro se niega a correr.
En resumen
En resumen, la mejor manera de correr con tu perro es asegurarte siempre de que esté en condiciones de correr y de que el clima sea el adecuado para que corra contigo. En segundo lugar, el entrenamiento y la mejora de la resistencia son importantes para evitar cualquier contratiempo en el futuro. Por último, tu perro también puede estar dolorido, así que vigílalo de cerca y enséñale órdenes y señales para empezar, correr y parar cuando sientas que no lo está disfrutando.